La historia viene del libro de Mateo 2, cuando relata el nacimiento de Jesús en Belén y lo visitan los sabios o magos para adorarle ofreciendo tres presentes: oro, incienso y mirra.
Que se crea en que fueron tres en cantidad, viene del número de los regalos que ofrecieron. Además, no se trataba de magos, sino que así eran llamados a quienes eran estudiosos de las estrellas en la antigüedad.
Sus nombres surgen porque a partir del siglo VIII se comenzó a nombrar a los reyes magos haciendo referencia a las edades del ser humano: juventud (Gaspar), madurez (Baltazar) y vejez (Melchor).
Lo que dice la Biblia
Mateo 2: 1-2,11. Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días del rey Herodes, vinieron del oriente a Jerusalén unos magos, diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos, que ha nacido? Porque su estrella hemos visto en el oriente, y venimos a adorarle.
Y al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra